Las ventajas de cambiar de trabajo dentro de la misma empresa

Siempre que pensamos en prosperar en una misma empresa dirigimos nuestra mirada hacia arriba. Un puesto más alto, un sueldo mayor, un número más elevado de personas a nuestro cargo… Pero pocas veces pensamos en cambiar de trabajo dentro de la misma empresa.

Lo primero que nos viene a la cabeza es que ese es el movimiento lógico que debemos hacer, que eso es lo que se espera de nosotros y que, de alguna forma, “a eso hemos venido”. Pero el camino que nos va a hacer laboralmente más felices no siempre se esconde detrás de un movimiento vertical, es decir, detrás de un ascenso.

Ventajas de cambiar de trabajo dentro de la misma empresa

La felicidad de lo nuevo

No es un secreto que todo lo que es nuevo nos aporta cierta ilusión. Estrenar móvil, ver nuestros progresos hablando un nuevo idioma y hasta aprender ese movimiento imposible que solo saben bailar nuestros sobrinos de 4 años. Superar fases y aprender o “estrenar” algo nos renueva, no solo a nivel intelectual, sino también a nivel emocional.

Es por ello que cuando nos sentimos estancados o con ganas de movimiento en nuestro puesto de trabajo, aunque sea lógico pensar en ascender para mejorar, debemos parar un momento y plantearnos qué queremos. ¿Quiero seguir perfeccionando el campo en el que estoy y crecer en responsabilidad para especializarme en ello? ¿O prefiero la seguridad y el amparo de mi misma empresa mientras aprendo de un campo nuevo? Pista: no hay una respuesta incorrecta.

Los pros y los contras no son lo importante. Lo importante es qué pro y qué contra pesan más para ti. Imagina que estás en un departamento en el que has dado todo de ti, pero de repente te sientes con ganas de cambiar. ¿Por qué no pedir un cambio dentro de la misma empresa a otro equipo o a otro departamento que te pueda aportar visiones de tu misma profesión que no tenías? Contrario a lo que algunos pueden llegar a pensar, ello no invalidará tus conocimientos o tu campo específico actual, sino que lo complementará. Tú mismo conseguirás que sea un efecto de suma, ya que tu cerebro integrará los conocimientos dándoles una nueva forma conjunta.

De hecho, ello incluso te aportará una ventaja competitiva frente a otros profesionales de tu sector. Solo tienes que pensar en que habrá otros que sepan lo mismo que tú ya sabías, pero no tendrán tu plus de conocimiento. Cambiar de trabajo dentro de la misma empresa empieza a parecer una idea más interesante, ¿verdad?

Siente el aire fresco

No te sientas culpable si en algún momento te sientes sin fuerzas en el trabajo. Cuando llevamos mucho tiempo en un mismo ambiente, es completamente normal sentir por un momento que perdemos el equilibrio y empezamos a pensar en modificar algo de aquella situación. En ocasiones, algunos profesionales dejan perder un buen trabajo en una empresa que les aporta valor solo por una mala gestión de su propia “crisis” emocional.

Por ello, un cambio horizontal puede aportarte el aire fresco que necesitas sin dejar perder un entorno laboral y una compañía con los que te sientes a gusto. Tus responsabilidades, metas e ilusiones cambiarán, y tus ganas se dispararán cuando explores nuevas perspectivas.

La implicación, la mejor demostración

Si te decides a pedir un cambiar de trabajo dentro de la misma compañía, lo más probable es que tus superiores, o los líderes de los demás equipos, lo perciban de forma extremadamente positiva.

Se trata de una petición que lo que busca es lo mejor para uno mismo, aportando dentro de la misma empresa. Y este tipo de generosidad en el campo profesional es un enorme activo en un trabajador.

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